No se trata de libros que se chupan, o se comen. No se trata de libros que huelen. Hoy hablaré de algunos libros que “saben”. Saben hacernos dormir con su historias bajo la almohada, saben invitarnos a que los terminemos porque su lectura es de ligero equipaje, no pesa. El poso que nos dejan tras su lectura es agradable, duradero y placentero, incluso para quienes consideren que estas lecturas son poco profundas.
En primer lugar trataré el poso que deja una onza de chocolate.
“Sabor a chocolate” de Jose Carlos Carmona (Málaga, 1963), es un libro para regalar, no para descargar de Internet, es para poseer, no para intercambiar. Actualmente lo podemos encontrar en edición de bolsillo, aunque puestos a elegir, es mucho más bonita la edición tradicional con sus pastas duras. Su atmósfera cabalga entre la música, la guerra, y el amor. Los sentimientos que leeremos y digeriremos como propios, igual que deshacemos una onza de chocolate en nuestra boca, no se ceban en un sentimentalismo exacerbado.
Su autor fue Premio Literario por la universidad de Sevilla, pero a mí no me atrajo por el premio, sino por su sencillez literaria, que a la vez : es compleja para cualquier aficionado a la escritura que alguna vez haya intentado decir lo justo, con las palabras justas. ¿Es de amor?, preguntarán algunos e inmediatamente lo rechazarán de sus listas de lectura, perdiéndose el sabor de sus páginas.
Pues sí lo es. Pero distinto, porque este tiene un color especial : es marrón como el chocolate con leche.
“Sabor a Canela” de Jose Carlos Carmona, es otro de sus libros de sabores, que además se escucha. Podemos oír los acordes de sus violines a manos de una chica enamorada de la música. Este libro es la excusa perfecta para otro par de noches con un sabor escondido bajo la almohada. Cuando lo abráis os encontraréis con la sorpresa, de que aún siendo “pequeño”, tiene ¡ 180 capítulos !, testigos todos ellos presenciales de una forma de narrativa y de contar que ya tuvo su preludio en el libro anterior. Incluye algunas reseñas históricas al final de los capítulos y una bella poesía de Heinrich Hart al final del libro. Sé que en los actos promocionales se regalaba el CD con la música a la que hace alusión la obra, pero desconozco como conseguir esa edición.
A quienes les encante lo breve, conciso, escueto, digerible y directo : podrán o no compartir el sabor de los libros que hoy recomiendo, pero quedarán prendados de esa prosa ágil con la que Jose Carlos captura toda nuestra atención.
Desde aquí hago un llamamiento al autor, para que se anime a escribir “Sabor a café”.
Un abrazo para todos y todas des -demispalabras-.
Me da la sensación de que estamos ante una sabrosa lectura que ya son dos y que se invita a una tercera. La invitación te ha quedado tan insinuante que habrá que hacerte caso. ¡Gracias!
ResponderEliminarNo he leído ninguno de los dos pero me animo a ello, puesto que quedé cautivado cuando leí "El perfume" dedicado a otro de nuestros sentidos el olfato. Esto de los sabores me atrae. Saludos
ResponderEliminarJose Carlos Carmona es muy polifacético. No he leído aún estos dos libros, pero tengo curiosidad después de leer tu post.
ResponderEliminarCada libro tiene su momento y estos además su sabor.
Abrazos
L.P.
Por recomendación del Viejo Pescador abri su blog,el cual me impresiona por los tópicos en relación a la lectura y selección de buenos libros,creo me convertire en asidua del mismo ,para seguir sus indicaciones y disfrutar de los mismos,gracias
ResponderEliminarYo soy una enamorada de estos dos libros, ¡os los recomiendo!
ResponderEliminarbsos!
Pues si me lo dices así tendré que leerlos pero será cuando acabe Juntos, nada más que nos recomendó Zamarat.
ResponderEliminarMuchas gracias por publicar y esperamos tu próxima recomendación.
Un abrazo
No conocía ninguno de los dos. Me los apunto para echarles un vistazo.
ResponderEliminarUn dulce sabor me deja tu recomendación.
ResponderEliminarUn saludo.
Sabor a chocolate es una delicia, me apunto Sabor a canela. Saludos
ResponderEliminarMe alegro mucho de la acogida inicial de estos dos sabores y os agradezco mucho los comentarios que habéis ido dejando a lo largo de estos días.
ResponderEliminarSólo añadir, Felipe, que el estilo de narrativa de "El perfume", es muy diferente al de Carmona. Pero espero que te gusten igualmente.
Un beso a todos des-
demispalabrasylasvuestras.
Por recomendación tuya he leido "Sabor a canela" y a demás de todo lo que tu dices podría añadir que en el libro hay una reivindicación a favor de las mujeres
ResponderEliminarEl autor nos describe la lucha de una mujer que aspira a ser directora de orquesta y se le niega sólo por el hecho de ser mujer .
Cuando pueda leeré "Sabor a chocolate"
Muchas gracias, Laura, por tu participación y esperamos el siguiente libro . Un abrazo
Sí Chelo, así es : hay un punto reivindicativo que preferí no reseñarlo para que no pareciera que es su punto fuerte.
ResponderEliminarMe alegro de que lo hayas leído y de que te haya gustado.
Sabor a chocolate ...¡¡es especial!!.
Un abrazo
He leído los dos y son cautivadores, me encantaron. Lástima que se lean tan rápido... te dejan con ganas de más. Yo también apuesto por más sabores.
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